EL AGUA: ¿La gran amiga del lavadero o la 
gran enemiga
El proceso de lavado, está compuesto por diferentes etapas: Prelavado, Lavado, Enjuagues, Blanqueo, etc.
Estas etapas deben ser establecidas muy claramente para lograr la mayor eficiencia.
En cada una de ellas, intervienen 4 factores con los que podemos "jugar".
Para lograr un muy buen proceso de lavado en húmedo, hay que combinar adecuadamente a nuestros propósitos, los 4 factores. Estos son: el tiempo de cada etapa del proceso de lavado (Tiempo de lavado), los productos químicos (Energía Química), la temperatura (Energía Térmica), la acción de la lavadora o de lavado a mano (Energía Mecánica).
Para que sea más sencillo de entender, se grafica con el círculo o Torta de Sinner (nombre de su creador), y que es como sigue:
- T. = tiempo de duración de cada etapa.
- E.T.= temperatura del baño de cada etapa
- E.M.= acción mecánica aplicada en cada etapa
- E.Q.= productos químicos utilizados en cada etapa
Si modificamos la cantidad de un factor, esta acción tendrá repercución directa en los demás factores.
Por ejemplo:
Si elevamos la temperatura, podrá reducirse el tiempo, manteniendo el mismo resultado de limpieza.
Si prolongamos el tiempo, a lo largo de toda una noche, obtendremos ya, buenos resultados a temperatura ambiente (E.T.), usaremos el residual de productos químicos (E.Q.), bajaremos el tiempo de proceso (T.), y el consumo de energía mecánica(E.M.).
La suma de las cantidades usadas de cada factor determina el costo directo del lavado. Costo que disminuye mediante la fase de "remojo" para la ropa muy manchada o de difícil lavado.
¿Está bien? ¿Está todo considerado?
No, de ninguna manera. Falta el quinto Factor y es el más importante.
Citaré para que se entienda los dichos de un gran fabricante de equipos de lavado de EE. UU.:
"Ponga un pañal sucio sobre una superficie a la temperatura que Ud. seleccione (Energía Térmica), golpéelo con un palo (Energía Mecánica), durante el tiempo que Ud. desee (Tiempo) y para completar agregue el mejor producto químico de lavado que conozca (Energía Química). ¿Qué obtendrá? Un pañal igualmente sucio, pero ahora roto. Haga lo mismo debajo de un chorro de agua y obtendrá un pañal limpio y sano (si no abusó de los golpes)."
O sea el AGUA es el Factor fundamental.
Sin agua no hay lavado. Por supuesto, excluyendo las prendas que deben limpiarse con solventes o sea lavado en seco.
Bien, si ahora estamos de acuerdo que no podemos olvidar la esencial importancia del agua, trataremos de llegar al tema que nos ocupa:
"Asesorar al lavadero, para que obtenga los mejores rsultados de calidad y economía"
Comenzaremos con un ejemplo de la vida real y actual.
Recordaremos primeramente que: la suma de las cantidades usadas de cada factor (E.T.+E.M.+T.+E.Q.) determina el costo directo del lavado.
Un amigo propietario de un lavadero nos consultó porque el agua disponible en su lavadero era muy ruinosa. Contenía un alto contenido de hierro y además era muy dura. Nosotros consideramos que resolver el problema durante cada lavado es sencillo, pero con un costo adicional innecesario. Este costo, haría que nuestro amigo no pudiera competir con sus colegas. Es claro, que lavar con agua "sucia" implica que los productos químicos deben "limpiar" el agua de esas impuresas y a la vez, la suciedad de la ropa. Por esta razón, la fórmula del producto químico es sensiblemente más costosa. Nuestra opinión es que si Ud. lava con agua inadecuada, su resultado será, un menor beneficio por utilizar procesos más costosos y más agresivos, lo que a la larga implicará una pérdida de clientes, por rotura de las prendas y/o mayores precios.
Por esta razón, le sugerimos hacer una pequeña inversión en su lavadero para corregir la mayor cantidad de elementos indeseables que tenía el agua. O sea, realizar unos pequeños ajustes para lograr que el agua que utilizara para lavar fuese lo más apropiada. Esa inversión se recuperaría en muy poco tiempo, por el uso de procesos de lavado más económicos y nuestro amigo podría lavar con el producto de la calidad que más le gustara, y al mejor precio posible.
Sin embargo, un colega nuestro, con gran habilidad aprovechó la ansiedad de nuestro amigo y fue por el camino más corto:
Le ofreció un producto de lavado que le resolvía el problema sin inversión. O sea, corregía el problema del agua en el lavado. Pero claro, su costo era un "poco" mayor. Y por ende, cada lavado sería "un poco más caro" que el de sus competidores.
O sea:
"Yo Gano, Tú Pierdes".
Los edredones de poliéster son una opción duradera cuando se trata de ropa de cama.
Elimina el agrisado, recuperando el blanco de sus prendas.
